LA CIENCIA DEL OLFATO: RECUERDOS, EMOCIONES Y MÁS

 Ciencia de la aromaterapia: descubre la ciencia del aroma

Las fragancias tienen el poder de desbloquear recuerdos e influir en nuestros gustos y emociones.

Cierra los ojos, inhala profundamente por la nariz. Permite unos momentos para que tu mente procese los olores de su entorno. Si bien este es un acto consciente, gran parte de lo que olemos día a día no se piensa dos veces. Sin embargo, este sentido es importante; es un poco como una superpotencia, armando una imagen, nuestra propia versión única, de nuestro entorno. “Se dice que nuestro sentido del olfato es 10,000 veces más sensible que cualquiera de nuestros otros sentidos”. Otros sentidos, como el tacto y el gusto, deben viajar a través del cuerpo a través de las neuronas y la médula espinal antes de llegar al cerebro. Nuestro sentido del olfato está vinculado a través de bulbos olfativos a la parte primitiva de nuestro cerebro llamada sistema límbico responsable de las emociones, la memoria y el comportamiento ”.

Recuerda la primera vez que sales a la playa, caminas por el bosque o te metes en una cama con sábanas limpias, tu sentido del olfato puede ayudarte a sentirte relajad@ y content@. El olfato juega un papel muy importante en cómo nos conectamos con el mundo que nos rodea y con las personas con las que lo compartimos, tiene esta profunda conexión con nuestros recuerdos y emociones, mucha gente puede recordar una instancia en la que un olor evocó un recuerdo y lo transportó al pasado, trayendo consigo una oleada de emoción.

Si bien sabemos que los animales dependen de este sentido para sobrevivir, los humanos lo necesitamos más de lo que pensamos. “Nos vinculamos y nos atraen las parejas por las feromonas, los aromas corporales únicos que todos tenemos. Las mujeres embarazadas se vuelven muy sensibles a los olores que pueden ser parte de las náuseas que experimentan durante el embarazo. Las feromonas comienzan su conexión madre-bebé incluso antes de que nazca. Son muy importantes para la vinculación y el apego, que se ha demostrado que afectan la salud, el bienestar y la capacidad de tener relaciones duraderas en el futuro ".

Esta experiencia humana temprana también puede influir en el gusto. Se dice que la vainilla, por ejemplo, es similar a la leche materna, pero la razón por la que nos gusta o no nos gusta un olor a menudo puede ser dictada por nuestras experiencias previas, así como por los receptores olfativos en nuestra nariz. “ Cada persona, a menos que sea un gemelo idéntico, es diferente. Hasta cierto punto, nuestra predisposición genética puede modular nuestra atracción básica por algo, pero aparte de eso, en realidad todo se aprende. Se aprende a través de la experiencia, la interacción personal y la cultura ”.

Perfumar activamente nuestro cuerpo con productos de belleza como el perfume nos permite personalizar la forma en que olemos para los demás y para nosotros mismos. Usar perfume es instintivo y vital. El perfume mejora o altera el estado de ánimo, se siente como un accesorio olfativo para todo lo que llevas puesto, proporciona un ritual reconfortante y familiar y, a veces, nos lleva a otros lugares de nuestra imaginación.

Esta idea de ritual y el poder del olfato se han utilizado a lo largo de la historia, que se remonta a los antiguos egipcios. Los primeros perfumes fueron aceites con esencias botánicas y animales, y eran muy raros y costosos. A lo largo de los siglos, especialmente en el siglo XIX, se generalizaron y se volvieron más asequibles. Hoy en día, las fragancias personales están disponibles a todos los precios posibles .

Si bien la accesibilidad del perfume ha aumentado con el tiempo, también lo han hecho los tipos de olor que se ofrecen. La división de la fragancia personal en categorías 'masculina' y 'femenina' es una invención reciente. “Las fragancias eran todas neutrales al género hasta mediados del siglo XIX. Hasta entonces, las mujeres usaban almizcles fuertes, los hombres usaban aromas de violeta; Todo era cuestión de estilo y gusto.

La fragancia también se usa en películas para ayudar a dar cuerpo a un personaje. Un buen ejemplo es Clinique Happy, usada en las escenas iniciales de la comedia Legally Blonde (2001) cuando la cámara se desplaza por un tocador mientras Elle se prepara, también está entretejida en el guión de Juno cuando el personaje epónimo (interpretado por Elliot Page) toma prestado un chorro. del perfume de Vanessa (interpretada por Jennifer Garner) mientras usa el baño. Ambos personajes son personas positivas con una disposición alegre, que es una combinación ideal para esta fragancia.

Sin embargo, el recuerdo de la memoria con olor no ocurre todo el tiempo ,cuando hay aromas que encontramos todo el tiempo, digamos el olor a café, es poco probable que eso te devuelva una personalidad realmente distinta. memoria porque encontramos ese olor en tantos lugares diferentes y de tantas formas diferentes que la experiencia y las asociaciones quedan escritas. Para que recupere un recuerdo realmente personal, el olor suele ser algo mucho más específico y algo que solo se encuentra raramente o en ciertas circunstancias; este tipo de aromas es más probable que sea un desencadenante de un recuerdo proustiano y desbloquee algo. de tu pasado para ti ". Dicho esto, el poder del aroma no se limita a nuestra propia vida diaria, espectáculos teatrales que incorporan un elemento olfativo, por ejemplo.

Tal vez sea recordar tomar una buena bocanada de albahaca fresca antes de agregarla a un plato o, literalmente, detenerse a oler las rosas. Dejar espacio para momentos de interacción consciente con el mundo no puede evitar promover una forma de vida más consciente.