APRENDE A MANEJAR LOS CONTRATIEMPOS

¿Cómo manejas los contratiempos? 

Es bastante común sentirse estresad@ cuando las cosas no salen según lo planeado, pero si trabajamos en nuestra capacidad de recuperación podemos estar mejor equipad@s para hacer frente a los altibajos de la vida.

Cambiar tu actitud también puede tener un gran impacto en como manejar las situaciones estresantes. Descubre  algunos consejos para manejar los contratiempos y las decepciones.

Cómo ser más resistente

Al trabajar en nuestra capacidad de recuperación, podemos aprender a dejar de lado el estrés y la ansiedad que acompañan a la decepción y seguir adelante con nuestras vidas.

A veces puede parecer que los contratiempos más pequeños son demasiado para nosotros y que no podemos recuperarnos de nuestros problemas.

Por ejemplo, si pasas mucho tiempo completando una tarea y luego tu jefe responde con muchas críticas, puede ser fácil sentirse desanimad@ y decepcionad@.

Pero puedes ayudar a ver la situación de una manera diferente: ¿tu jefe realmente está siendo crítico o simplemente está cambiando las cosas según sus gustos? ¿La crítica es personal o constructiva?

A veces podemos tomar las cosas en serio y permitir que permanezcan en nuestras mentes más tiempo del que deberíamos, en lugar de aceptar que la situación no es tan mala como parecía al principio y seguir adelante.

Hay algunas formas de construir resiliencia. Puedes comenzar aprendiendo a ser más asertivo, lo que te ayudará a lidiar con situaciones difíciles. 

También puede ayudar a buscar el equilibrio en su vida: ¿hay un área que domina todo lo demás? ¿Pasas demasiado tiempo enfocado en el trabajo?

Trata de dar un paso atrás y prestar más atención a otras áreas de su vida, como amigos y familiares o pasatiempos.

Otro enfoque es centrarse en la vida consciente y aprender a aceptar que no podrás controlar todas las situaciones de su vida. Todo lo que puedes hacer es enfrentar cada nuevo desafío a medida que surja.

Cómo lidiar con la decepción

Cuando te enfrentas a noticias decepcionantes, puede ser difícil dejar ir y seguir adelante con tu vida.

Puede ser tentador cerrar el mundo y pasar tiempo comiendo helado y mirando cajas (¡y eso está bien!).

Sin embargo, después de un tiempo, puedes comenzar a derribarte. Puede ser útil mirar hacia atrás en la situación y pensar en cómo puedes evitar que los mismos problemas te depriman.