Maneras de ahorrar para tu próximo viaje

Para muchas personas, viajar no es un lujo, es una necesidad. Es una manera de aprender, de sentir, es el momento en el que más se sienten vivos y plenos.

El comentario que más reciben con más frecuencia los viajeros empedernidos al regresar de uno de sus viajes es: "Tú no paras quieto, debes estar ganando muy bien", pero cuando estás llevando a cabo una de tus pasiones se aprenden grandes lecciones de ahorro para poder llevarlas a cabo.

Cada situación personal, estilo de vida y responsabilidades  de cada una son distintas, pero a continuación analizamos maneras de ahorro reales que sé que puedes adaptar a tu día a día y que van dirigidas a ti, viajero real que lees este post:

1. Basta de gastar 60 euros por una manicura y 100 euros por una sesión de peluquería. Solución: Busca, encuentra y prueba sitios más económicos dónde realizártelos. Puedes encontrar 15 euros por una manicura y 20 euros por ir a una sesión de peluquería a la semana. Existen lugares...encuéntralos. 

2. Identifica, maximiza y utiliza tus talentos (Side Job)

En el pasado un profesional tenía múltiples carreras, eran abogados, médicos, poetas y políticos algo que ante nuestra realidad parece imposible, pero cuando se tiene un talento y a él va unida una pasión, es un sacrilegio no desarrollarlo y explotarlo (venga… que por algo lo tienes). Al identificar, maximizar y utilizar tu talento, ¿Qué obtienes? Un Side Job o un trabajo adicional a tu trabajo regular.

Ya sea hacer accesorios, vender productos de catálogo, dar clase de piano o de idiomas, cuidar niños, cantar en actividades, hacer uñas, bizcochos, coser, entre otros, (quién sabe si de ahí, surja tu próxima oportunidad laboral o hasta crees tu propio negocio). . Ese dinero que generes debe ir directamente a una cuenta destinada a tus viajes y de ahí … ni lo toques, ni lo saques.

3. Reenfoca y redefine tu vida social

Con el paso de los años y el permitirnos explorar experiencias diferentes a las que normalmente estamos expuestos, debe mutar muchísimo y en este proceso te percatarás que gastas menos. Atrás quedó la costumbre de pasar un fin de semana cenando y tomando copas en el nuevo restaurante de la ciudad en el cual podía gastar de 100 A 150 euros en tres horas. En su lugar se disfruta la maravillosa experiencia que es hacer turismo en tu entorno, trazar una ruta y seguirla.

También lo placentero y divertido que es hacer un picnic una tarde de domingo en un parque, en compañía de un libro, o hacer un brunch con tus amigos en alguno de los apartamentos, ver el atardecer , comer un helado, tomar un café en un sitio agradable, ¿y que tienen en común cada una de estas actividades? Que al realizarlos con amigos o parejas puedes dividir gastos, también llenar tu neverita con la bebida y comida que desees y no únicamente estarás reinventando tu vida social al exponerte a nuevas experiencias y sensaciones, sino que también (con la debida planificación) estarás ahorrando.

4. LLeva la comida a la oficina

Este es un clásico a la hora de ahorrar y sencillamente es el consejo más efectivo. Al comenzar un plan de ahorro, lo primero que debes hacer es evaluar a dónde tu dinero se dirige. En muchos casos sin duda alguna es en la comida. Puedes gastar fácilmente 200 euros mensuales en almuerzos y café  (y eso … puede ser un pasaje a Orlando, Miami y hasta New York). El mejor consejo es dedicar dos horas los domingo y cocinar la comida a ingerir en la semana. (Ej. avena, ensalada de granos, vegetales salteados, patatas asadas, ensalada de frutas, entre otras delicias.) Esto no  hará tu semana más sencilla, sino te alimentaras sanamente y ahorraras una gran cantidad de dinero (venga…que una vez a la semana ese almuerzo con un amigo es meritorio y necesario, pero limítate hacerlo solo una vez).

5. Ahorrar… es un estilo de vida

Al igual que una alimentación sana, el ahorrar debe ser enfocado como un estilo de vida y no como algo que te cuesta realizar. La manera más efectiva para lograrlo, es sacar el presupuesto que vas a utilizar en algo en particular y atarte a él. (Ejemplo: x cantidad va dirigida a la comida, x cantidad la gasolina, x cantidad a misceláneos, x cantidad para ocio y diversión etc.) 

Y cuando se te acabe esa cantidad que te has propuesto, tendrás que decir “NO” ante ese deseo repentino de comprarte esa camisa, ante esa invitación a cenar, y ante ese café. ¿Con esto qué logras? Vivir de acuerdo a tu realidad y metas financieras.

Para mí viajar no es un lujo, es una necesidad. Es mi manera de aprender, de sentir, es el momento en el que más me siento viva y plena.  Cada vez que subo a un avión estoy trabajando en el doctorado de mi vida y espero que estos simples cinco pasos, te ayuden a descubrir el mundo allá fuera.