COMO EMPEZAR A VIVIR LENTAMENTE
Cómo empezar a vivir lentamente
Para muchos de nosotros, la vida diaria parece haberse convertido en una lista interminable de cosas por hacer y tareas por completar: levantarse temprano, preparar el desayuno, preparar el almuerzo, llevar a los niños a la escuela, responder a esos correos electrónicos, etc. y en. La vida siempre estará ocupada, pero eso no significa que no haya tiempo para detenerse.
Al establecer un ritmo de vida más suave, podemos encontrar el tiempo que necesitamos para vivir el momento y aumentar nuestra sensación de bienestar simplemente relajándonos un poco.
¿Qué es la vida lenta?
Entonces, ¿qué es la vida lenta? Para algunos, es una elección de estilo de vida que afecta todas las decisiones, pero para la mayoría de nosotros, se trata de hacer pequeños cambios que nos ayuden a desacelerar el ritmo de la vida moderna.
Esencialmente, vivir lentamente significa permitirse el tiempo para disfrutar de todas las pequeñas cosas y hacer todo lo mejor posible en lugar de lo más rápido posible.
El principio central de la filosofía slow es tomarse el tiempo para hacer las cosas correctamente y, por lo tanto, disfrutarlas más.
Vivir lentamente nos permite ganar más tiempo para las cosas que son más importantes para nosotros. Cuando definimos lo que es más importante para nuestro propio bienestar y decimos no a actividades y comportamientos que no lo son, nuestro estilo de vida se vuelve más enriquecedor.
Podemos adoptar un enfoque más lento para la mayoría de los aspectos de nuestra vida. La moda lenta nos anima a pensar más en la ropa que usamos y considerar dónde estará cada artículo en los días, meses y años venideros antes de realizar una compra. Los viajes lentos nos mantienen fuera de los caminos trillados, realmente interactuando con un lugar en lugar de solo la guía.
Todo es un poco higiénico
Vivir la vida a un ritmo más suave a menudo se asocia con el fenómeno danés de hygge. Crear un ambiente cálido y disfrutar de las cosas buenas de la vida con buenas personas es fundamental para el estilo de vida danés y podría ser parte de la razón por la que a menudo se les considera uno de los países más felices del mundo.
Hygge se trata de una atmósfera y una experiencia. Se trata de estar con las personas que amamos. Una sensación de hogar. Un sentimiento de que estamos a salvo.
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