EL CAMINO DE LA PAZ. HACIA UNA NUEVA ERA
LA PAZ ES EL CAMINO
Este post está basado en el libro "LA PAZ ES EL CAMINO" (2005) de Deepak Chopra, donde el autor nos invita a la evolución de la conciencia, dejando la pasividad y asumiendo persona por persona, el control de nuestro destino. ¿Qué es lo que mantiene la guerra? El atraso y la dependencia de las reacciones que los seres humanos hemos tenido desde el principio de la historia. La violencia no es la esencia de la naturaleza humana, a pesar de estar generalizada y ser innata. También lo es el amor, que es lo contrario a la violencia. La humanidad ha evolucionado y ha superado muchas cosas que anteriormente se consideraban innatas. Hemos aprendido a usar la razón. Hemos superado la superstición y la enfermedad. Hemos sacado a la luz la oscuridad de la psiquis. Hemos penetrado en el funcionamiento de la naturaleza. Todos estos logros señalan cuál debe ser el paso siguiente: admitir que los seres humanos hemos dejado la guerra.
El camino de la paz se basa en lo mismo que dio paso a la edad de la ciencia: un salto en el estado de conciencia. Quienes fueron testigos de las primeras demostraciones de los motores a vapor, la luz eléctrica y las vacunas, se adaptaron a ellas porque no era coherente leer a la luz de una vela, viajar a caballo y sufrir los estragos de las enfermedades. Se había producido un salto en la conciencia colectiva.
De la misma forma, el camino de la paz puede cambiar el futuro. Si cada uno de nosotros demostramos que la paz deja más satisfacciones que la guerra, la conciencia colectiva podrá cambiar. Al levantarnos, a cada uno de nosotros nos ha parecido normal no tener que matar (ya observamos el impacto y las reacciones que a todos nos provocaron los sucesos acaecidos en París), pero nuestra sociedad no puede decir lo mismo y es hora de que tome una dirección coherente con lo que los individuos quieren.
No puede haber excusa para vivir comódamente mientras estamos inmersos en una cultura de muerte y violencia. Los individuos no somos espectadores inocentes de la guerra, dependemos de ella política, económica y socialmente. Si individualmente cambiamos la forma de concebir la paz, la guerra terminará para cada uno de nosotros. Un millón de pequeños terremotos mueven más la tierra que un cataclismo de enorme poder.
Mathama Gandhi expresó una profunda verdad cuando dijo: "No existe la paz. La paz es el camino". Lo que quería decir es que la paz no se consigue actuando con violencia o recurriendo a ella. La paz tiene su propio poder y su propio esquema para organizar los acontecimientos, pero hacen falta sustitutos para satisfacer las necesidades que son satisfechas por la guerra y que no son triviales, porque la aventura, el poder y la posibillidad de expansión son valores primarios.
Y si no hay una forma viable para que la gente común y corriente disfrute de la aventura, el poder y las posibilidades de expansión, resulta preferible el camino ilusorio de la querra a pesar del costo de las vidas humanas. Pero si escogemos el camino de la paz, encontraremos poder, conseguiremos la libertad y las emociones que supuestamente ofrece la aventura y podemos expandir el estado de conciencia sin tener que invadir otro país y apoderarnos de sus riquezas. La guerra, en cambio, implica fuerza bruta, cuerpos luchando contra otros cuerpos, destrucción de ciudades que hay que reconstruír y despilfarro en armas para conseguir otras más mortíferas
Si la gente pudiera obtener satisfacción sin recurrir al destrucción, creo que lo preferiría. Millones de personas quisiéramos vivir sin necesidad de destrucción. Por eso estamos buscando un camino para lograr que esta intención pueda ser más poderosa que la guerra, lo cual, afortunadamente no es tan complicado.
Según los antiguos textos védicos, uno sabe si está viviendo en el camino de la paz cuando están presentes tres cosas:
**SEVA: Nuestras acciones a nadie hacen daño y a todos benefician.
**SIMRAN: Recordamos nuestra verdadera naturaleza y nuestra finalidad para estar aquí.
**SATSANG: Pertenecemos a la comunidad de paz y sabiduría.
Estas tres palabras con S vienen del sánscrito. Describen el ideal de vida de cualquier persona espiritual. Pero lo más importante es que desencadenan un poder que el materialismo no puede derrotar, de la misma manera en que una roca no puede derrotar a la lluvia a pesar de que una es dura y la otra blanda, o en que un árbol no puede derrotar al viento, a pesar de que uno es sólido y el otro invisible. Este poder quizá parezca abstracto, pero la satisfacción no lo es y cada una de las palabras con S producen una satisfacción que la guerra jamás podrá ofrecer.
**SEVA: Produce la alegría de saber que las acciones cotidianas sustentan la vida como totalidad, que somos parte de la evolución del planeta y no de su destrucción y que podemos vivir en paz con la conciencia porque hemos cumplido con el deber de ser administradores de todos los aspectos de la naturaleza, incluso de los más sagrados.
**SIMRAN: produce la satisfacción de obtener mayores posibilidades. No somos individuos perdidos en un mar de humanidad. Podemos encontrar nuestra propia identidad y nuestra propia verdad porque un camino único de crecimiento se abre para cada uno de nostros.
**SATSANG: Produce la satisfacción de no tener enemigos porque nuestro hogar es el mundo y el resto de la familia humana es parte de nosotros. Las generaciones ya no están separadas por una brecha sino que colaboran para crear un mundo sin pobreza, sin ignorancia y sin violencia.
La razón principal que hace de la paz el rumbo hacia el futuro es que estas tres cosas, por sí mismas marcan su rumbo. Según algunos cálculos, entre la tercera parte y la mitad de los estadounidenses aceptan valores de la Nueva Era, un espectro tan amplio que ya no es necesario darles ese calificativo. Lo importante es descubrir que somos necesarios y que no estamos solos. ¿Qué es la voluntad de una persona en comparación con los ladrillos, los torreones para ametralladoras y el alambre de espino?. Pero la voluntad es una manifestación de la conciencia y a ella obedece el rumbo del futuro cuando decidimos cambiarlo.
TENDENCIAS PARA UNA NUEVA HUMANIDAD
¿CRES QUE NECESITAMOS UNIRNOS EN TORNO A UNA ECONOMÍA MUNDIAL?
¿QUIERES VER LOS MARES LIBRES DE CONTAMINACIÓN?
¿CREES QUE ESTADOS UNIDOS DEBE CONDUCIR AL TERCER MUNDO HACIA ECONOMÍAS SOSTENIBLES?
¿DEFIENDES LAS LIBERTADES RELIGIOSAS Y QUIERES ACABAR CON EL FANATISMO RELIGIOSO EN TODAS SUS FORMAS?
¿QUIERES LA PLENA IGUALDAD DE DERECHOS PARA LOS INMIGRANTES?
¿QUIERES QUE SE ACABEN TODAS LAS CENTRALES NUCLEARES?
¿QUIERES LA DESMILITARIZACIÓN DE LOS ESTADOS UNIDOS?
¿QUIERES QUE SE BUSQUE UNA ALTERNATIVA PARA LOS COMBUSTIBLES FÓSILES?
¿CREES EN LA IGUALDAD DE LAS MUJERES EN TODAS LAS SOCIEDADES?
Muchos años de esfuerzo van a ser necesarios para que éstos propósitos se hagan realidad, si bien ya están tomando forma como creencias aceptadas. Millones de personas no se identifican con la Nueva Era (inciso: el libro está escrito en 2005 y ahora han pasado 10 años con los cambios sociales, políticos y económicos que se han producido y otros que vienen en camino), que nunca han participado en marchas en favor de la igualdad de derechos o contra la contaminación. El camino de la paz incluye todos estos objetivos, ya que cada uno de ellos cae dentro de la categoría de servir al Bien Común (Seva), de mejorar la propia imagen (Simran) o de borrar las diferencias para crear una nueva comunidad humana (Satsang)
"LA PAZ ES EL CAMINO"
Deepak Chopra
Editorial Granica (2005)
El libro sigue guiándonos para trabajar individualmente, ya que según su teoría el cambio individual de la visión, cambiará la conciencia colectiva. El libro, como todos los del autor es muy interesante, tomando como premisa el concepto de que los cambios intentados hacia la paz (el activismo y las causas humanitarias) han resultado inútiles, la única estrategia que todavía no se ha puesto a prueba es la paz en sí misma.
La novedosa propuesta de Chopra es la transformación personal de cada uno para acabar con la guerra y la violencia. Sólo a partir de un cambio radical de los valores y las prácticas de nuestra vida cotidiana haremos posible LA PAZ COMO SISTEMA.
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