EMPRESAS CARDIOSALUDABLES

EMPRESAS CARDIOSALUDABLES

Para que la promoción de la salud cardiovascular en el ámbito laboral pueda 

tener éxito, requiere de escenarios que permitan e impulsen modificaciones en los comportamientos de los trabajadores, orientándolos hacia el autocuidado y la autogestión del riesgo, buscando que se generen aprendizajes claves y  efectivos para adoptar un cambio en su estilo de vida.

Enemigos del corazón

Ciertas conductas propias de las personas, así como algunos riesgos presentes en las empresas y determinadas características del trabajo, pueden modificar los factores de riesgo del trabajador o potenciar los existentes. Estas son algunas de las condiciones que incitan la aparición de enfermedad cardíaca:

• Malos hábitos

Alimentación

El efecto de la dieta sobre el desarrollo de enfermedades del corazón es directo, una mala alimentación incide en la aparición de colesterol, tensión arterial, diabetes y obesidad (especialmente abdominal), debido a la ingesta de alimentos procesados y con alto contenido de azúcar, sal y grasas saturadas. A lo que se suma el consumo de alcohol y la poca demanda de agua.

Tabaquismo

El cigarrillo es uno de los factores de riesgo cardiaco más importantes, ya que la incidencia de la patología coronaria en los fumadores es tres veces mayor que en el resto de la población, en donde la posibilidad de padecer una enfermedad de corazón es proporcional a la cantidad de cigarrillos fumados al día y al número de años en los que se mantiene este nocivo hábito.

Sedentarismo

La inactividad física es otro de los factores que, junto con la mala alimentación puede conducir al aumento de peso y al daño mala alimentación puede conducir al aumento de peso y al daño cardiaco, pues existe una relación directa entre el sedentarismo y la mortalidad cardiovascular. Una persona que no realiza ejercicio presenta más riesgo de sufrir hipertensión.

RIESGOS LABORALES

Además de los anteriores factores que son responsables de aproximadamente el 75% de los casos de enfermedad cardíaca, existen ciertos agentes laborales que  también pueden incidir en su aparición:

Riesgo psicosocial

Desde hace algunos años, se hizo evidente la relación que existe entre los problemas del corazón y el estrés laboral, causado por ciertas condiciones como la  sobrecarga de actividades, imposibilidad de tomar decisiones, aislamiento social,  inestabilidad, falta de oportunidades de progreso dentro de la empresa, horarios prolongados, no compensación entre esfuerzo y retribución , manifestado por salarios bajos, entre otros. 

Cuando se habla de riesgo psicosocial, un grupo que merece especial atención es el de las mujeres. Ellas conforman un sector cada vez más numeroso dentro de la  población laboral, en donde por lo general su demanda psicosocial aumenta por el impacto de las obligaciones familiares, pues siempre dedican más tiempo a estas labores que los hombres.

Jornada laboral

Diferentes estudios sobre infarto del miocardio e hipertensión arterial, muestran que puede existir una relación entre las jornadas laborales prolongadas (más de 55 ó 60 horas semanales) y la aparición de patologías cardíacas, debido a los altos niveles de tensión y falta de relajación Por otro lado, el trabajo en turnos rotatorios con variaciones del ritmo circadiano (dormir a diferentes horas y no mantener los mismos horarios para descansar), genera alteraciones cardiovasculares derivadas de la adopción de ciertas conductas como el tabaquismo, el cambio en el horario de las comidas y la preferencia por la “comida chatarra”, lo que a su vez produce transformaciones en el  depósito de grasa corporal y en el porcentaje de colesterol.

Factores Físicos

Vibración: El efecto de las vibraciones puede darse sobre un segmento corporal o sobre todo el cuerpo. En ambos casos, la exposición prolongada se asocia con daños en las arterias. Dentro de los sectores en riesgo se encuentran los trabajadores forestales agrícolas, conductores de vehículos de motor, aquellos que utilizan herramientas manuales mecánicas y quienes trabajan cerca de máquinas vibratorias.

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Ruido. Muchos trabajadores están expuestos a fuentes de ruido: motores, engranajes, máquinas eléctricas, equipos neumáticos, taladros, compresores, etc. Los  sonidos superiores a los 85 dB pueden generar aumento de la tensión arterial.

Intensidad física. Los oficios sedentarios se asocian con el aumento del riesgo cardiovascular por la falta de movimiento que incita a la obesidad e 

incremento del colesterol. A su vez, las actividades con exceso de trabajo físico se relacionan con el riesgo de infarto del miocardio, cuando la labor se prolonga por más de 4 ó 5 horas.

Temperaturas extremas. La exposición a temperaturas altas suele producirse en industrias de fundición y minería.Cuando se genera un shock calórico, la aparición, la aparición de un evento isquémico puede estar relacionada en casos en que hay una preexistencia de riesgo coronario. Así mismo, la exposición al frío extremo como el presente en cuartos fríos de almacenamiento, tiene la capacidad de inducir un espasmo, es decir, una contracción temporal y súbita de una de las arterias que suministra sangre al corazón, disminuyendo el flujo sanguíneo.

ENTORNOS DE TRABAJO MÁS SALUDABLES 

El efecto de la gestión del riesgo resulta ser el común denominador para el aseguramiento de la salud de los trabajadores, lo que a su vez se traduce en su potencial productivo y por ende en el surgimiento de la economía de un país.

Promover una organización saludable no solo ayuda a reducir los costos derivados de la enfermedad, sino que mejora la calidad de vida de las personas y con ello, su desarrollo individual y profesional.

Lograr el control de las enfermedades del corazón, es una acción indispensable que debe involucrar tanto a los empleados como a la empresa en su conjunto para que el individuo modifique su estilo de vida, reduzca las posibilidades de desarrollar afecciones cardíacas y en su lugar promueva hábitos protectores.

  

La actividad laboral ocupa casi dos terceras partes de la vida de una persona, Cada trabajado invierte casi diez horas diarias en promedio al trabajo, depende del tiempo utilizado en el transporte, esto corresponde a un 40% de las 24 horas. Si duerme 8 horas, esto equivale al 33%, dejando a su familia y a asuntos personales una dedicación del 27% de su tiempo por día.

Entonces si se logran ofrecer entornos laborales saludables se podrán impulsar actividades sanas que adicionalmente sean costo- eficientes para las empresas que las promueven. La salud de los trabajadores debe entenderse como un capital positivo, considerándola una inversión y una ventaja competitiva

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Los planes de prevención en las empresas deben dirigirse a desarrollar cuatro estrategias fundamentales:

1. Informar, divulgar y educar para modificar estilos de vida.

2. Minimizar los factores de riesgo para lograr menos enfermedad.

3. Disminuir la baja productividad (empleados que no producen al máximo porque trabajan con dolencias o afecciones).

4. Diseñar planes de seguridad y gastos médicos y el absentismo por enfermedad.

LA EMPRESA COMO FORJADOR DE HÁBITOS SANOS

Para mejorar la salud cardiovascular de los trabajadores, las compañías deben adoptar las siguientes medidas que contribuyen a minimizar los riesgos asociados con el corazón.

Peligros                 Medidas Correctoras

Sedentarismo:  Fomento de la actividad física

Alimentación desequilibrada: Organizar charlas sobre alimentación equilibrada

Tabaquismo: Cambiar avisos prohibitivos por avisos que inviten a respirar

                   aire limpio

Estrés: Fomentar la escucha y el trabajo en equipo

Condiciones nocivas propias del trabajo:  Contemplar en el Sistema de Gestión de la Seguridad y Salud en el Trabajo todas las acciones de mejora que se deban adoptar para minimizar los agentes dañinos en el entorno laboral. 

Es hora de que las organizaciones y sus colaboradores entiendan la importante relación que existe entre el trabajo y las enfermedades del corazón, contemplando las medidas que pueden tomarse en la prevención, manejo y tratamiento de estas patologías para el beneficio de los trabajadores; sólo así se evitará que muchas vidas se sigan perdiendo.