CONOCER EL ORIGEN DE LA FELICIDAD NOS AYUDA A ALCANZARLA
Este post está inspirado en el libro de Desmond Morris: "La naturaleza de la felicidad". El autor de libro es un experto en Zoología y Antropología y antes de escribir el libro que le dió la fama "El mono desnudo" (del que se han vendido más de 10 millones de ejemplares y ha sido traducido a prácticamente todos los lenguajes conocidos) ya había escrito más de cincuenta monografías y siete libros sobre Zoología y Antropología que le han convertido en uno de los divulgadores científicos más populares de nuestro tiempo.
La obra no es ningún sermón para que se actúe de un modo determinado, a la manera de los libros de autoayuda, sino una serie de conocimientos que podrá usar si quieres ser más feliz. Los métodos para ser feliz son múltiples y todos tienen aspectos positivos y negativos. Únicamente explorando toda la gama de posibilidades cabe esperar despejar la verdad sobre este complejo fenómeno.
En el momento en que nos ocurre algo estupendo nos invade una profunda emoción, una sensación de auténtico placer, una explosión de delicia absoluta. En ese momento somos realmente felices; lamentablemente ese estado no dura mucho. La felicidad intensa es una sensación efímera y pasajera, pero la euforia desaparece enseguida. Como dijo un cínico: "La vida es una desgracia continua interrumpida por momentos felices".
Haciendo un poco de historia y conocer la causa de esas interrupciones hay que remontarse a nuestros remotos antepasados: el cambio de una vida apacible y tranquila de recolectores de fruta en los árboles a un cambio de vida más arduo como la exigente caza en grupo, requirió una actitud mental distinta y mayor cooperación, comunicación, inteligencia, valor y capacidad para aplicarse, durante largos períodos de tiempo a un objetivo concreto.
Para llevar a cabo la nueva y peligrosa pauta de alimentación, tuvimos también que hacernos mucho más fuertes y dedicarnos por instinto a una actividad física de esfuerzo. Una vez conseguido esto, nuestra nueva vida social requería otro factor: desarrollar la capacidad de compartir el alimento; de no haber superado esta norma, no habríamos superado la primera fase evolutiva. La actitud dominante debió ser de apoyo mutuo, de cooperación y reparto, sin lo cual la especie no habría evolucionado.
Gran parte de nuestras actividades actuales son sustitutos simbólicos de la caza primitiva; esto comenzó en el momento en que la revolución agrícola desplazó a la caza como medio de supervivencia; tan pronto como ésta desapareció surgió la caza-deporte en las que se mataban animales como pasatiempo y esa emoción perduró gracias al invento de los deportes sangrientos, que se desarrollaron en el Coliseo de Roma. En muchos países la caza deportiva sigue en auge en sus diversas modalidades como si no se hubiera producido ningún proceso de evolución de la civilización. Afortunadamente los antiguos deportes circenses sangrientos han dado paso a los deportes de estadio; en el fútbol la presa es la portería que hay que matar simbólicamente con el balón y como es un objetivo muy fácil de batir, debe estar guardada (por un portero) para mayor emoción del juego.
La felicidad significa cosas muy distintas según las personas: la felicidad imperiosa de cazar a una presa, metamorfoseada y elevada hoy en día a la consecución de empresas creativas. Con la Revolución Agrícola sobrevino un desastre para muchas personas, hombres y mujeres inteligentes orientados a una meta, ya que se vieron y se ven todavía obligados a una vida rutinaria en el campo. La Revolución Industrial no mejoró la situación, el trabajo se hizo aún más anodino, y el objetivo del producto final les era ajeno. Habíamos pasado de luchar contra la esclavitud en Grecia para sustituirlo por la esclavitud asalariada. Una tarea aburrida y repetitiva sustituía a las emociones de la caza primitiva; esta circunstancia hizo que hubiera que buscar la felicidad en aficiones y vacaciones, en los aledaños de la vida, no en el centro.
FELICIDAD DE FINALIDAD
El emprendedor
Esta felicidad tiene tres fases: la anticipación, la apetencia y la consumación. Dada la clase de animal que somos- intensamente curiosos, explorativos e inventivos- constantemente imaginamos nuevos proyectos, experiencias y retos, y planificarlos nos hace felices. Al concluir cada tarea nos invade una felicidad por la súbita satisfacción que sentimos. Un breve descanso y vuelta a empezar.
FELICIDAD COMPETITIVA
El triunfador
Está relacionada con la anterior pero existe una diferencia clave, en la competitiva la felicidad siempre tiene que ser a costa de un rival. La terrible definición sería: "La felicidad es una sensación agradable que surge al contemplar la desgracia ajena", una definición menos inquietante sería: "La felicidad es un placer que no se comparte"
FELICIDAD COOPERATIVA
El cooperador:
Siempre hemos tenido que compensar la competitividad con la cooperación porque, como animales tribales que somos, pocas veces habríamos logrado el éxito como individuos solitarios. Y nos procura felicidad, no por un sentido moral de comportamiento sino porque biológicamente estamos programados para el apoyo mutuo.
El comportamiento cooperativo puede parecer altruista, pero en realidad es tan egoísta como el comportamiento cooperativo. Si experimentamos una felicidad ayudando a nuestros amigos, ello es debido a que la evolución ha previsto que los miembros de la tribu se ayuden mutuamente como mecanismo de defensa contra el fracaso del grupo.
Todas las organizaciones humanitarias actúan sobre esa base, y la felicidad que les produce llevar comida a los hambrientos en su área de acción (antes era en países remotos, hoy es en el barrio o comunidades cercanas) se basa en su capacidad para verlos como prolongación de su propia comunidad
FELICIDAD GENETICAEl parentesco
El impulso de reproducir la especie es un imperativo biológico tan poderoso que su consecución procura momentos de "felicidad genética". Todas las fases de este proceso - enamorarse, emparejarse, el nacimiento y crianza del retoño- son susceptibles de inducir profundas oleadas de felicidad primitiva-
El amor por la pareja o el hijo supera cualquier otro afecto tribal en razón al factor genético. "Enamorarse" es una intensa experiencia emocional en nuestra especie y algo que nos distingue de otros primates y simios. Aunque el amor y el sexo están íntimamente relacionados, es evidente que la dicha amorosa y la dicha sexual son dos sensaciones distintas.
La felicidad sensual sin sexo puede llegar a ser muy profunda, y existen también numerosos ejemplos de etéreo placer del amor platónico, pero cuando ambos se combinan, el resultado en cuanto a intensidad emocional resulta explosivo, y procura lo que probablemente sean los momentos de felicidad más intensa que conoce el ser humano
FELICIDAD CEREBRALEl intelectual
Como el cerebro humano ha adquirido un gran tamaño a lo largo de la evolución, en su fase actual es capaz de obtener una sensación de felicidad simplemente jugando consigo mismo: la esencia de estos juegos que pueden ir desde los más triviales- jugar a las cartas o jugar al ordenador- a los más profundos, de creatividad artística e investigación científica, es el ejercicio cerebral lo que conlleva procesos de pensamiento complejos que son motivo y fin en sí mismo.
Las anteriormente citadas son las fuentes primarias de felicidad, siguiendo al autor tendríamos otras fuentes que solamente las citaré
FELICIDAD DEL RITMO: El bailarín, relacionada con las actividades rítmicas intensas. Música, canto, danza, la gimnasia, el atletismo. Cualquier actividad humana que tenga un compás, tiene la virtud de arrastrarnos a una vertiginosa y extraña sensación de euforia.
FELICIDAD DEL DOLOR: El masoquista, extrañamente hay adultos que han modificado el sistema de alarma biológico de autoproteccion orientados a la supervivencia y buscan el dolor como medio para lograr un estado de excitación placentera y que, en los extraños rituales sadomasoquistas, se dejan pegar o torturar físicamente de diferentes maneras. Se trata de una modalidad curiosa de felicidad pero muy importante para los que la persiguen.
FELICIDAD DEL RIESGO: El temerario, asumir riesgos deliberadamente es un medio de felicidad para ciertos individuos para quienes la vida carece, por lo visto, de retos.
FELICIDAD SELECTIVA: El histérico, este es el tipo de felicidad basado en ignorar los horrores de la vida que nos rodea. Los depresivos creen ser los únicos que ven el mundo en su aspecto real y que la gente feliz no ve y no entienden que nadie pueda disfrutar de un momento de felicidad mientras haya miles de personas hambrientas, torturas en las cárceles, experimentos con animales, polución medioambiental o cualquier otro desastre que a ellos tanto le preocupan.
CONCLUSIÓN
El autor, como resumen define de esta forma la felicidad: "el súbito trance de placer que se siente cuando algo mejora". La clave para comprenderla es saber que sólo existe en su forma intensa cuando se produce algo muy bueno en algún aspecto de nuestra vida. Este instante pefecto puede ser una experiencia importante como el nacimiento de un hijo o algo tan trivial como un refresco o un día de placer culinario.
Por estar ligada al cambio, la felicidad intensa no es una sensación duradera, sino efímera; es evidente además que se presenta de muy distintos modos y se obtiene en muy variadas circunstancias.
La clave para aumentar la "FELICIDAD DE FINALIDAD" radica en comprender que la especie humana no está hecha para llevar una vida trivial y rutinaria, carente de grandes retos.
Por lo cual a mi modo de deducir, no lo afirma el autor, emprender estaría dentro de nuestra naturaleza intrínseca que nos viene marcada biológicamente de nuestros ancestros, en nuestro marcador genético.
Para quiénes aspiren a ganar puntos en la escala de felicidad la clave es negarse a aceptar que exista un solo tipo de felicidad y reconsiderar las fuentes alternativas de satisfacción a que pueden recurrir; hay ámbitos vitales en los que nunca hubiéramos pensado que pudiera hallarse un filón de felicidad.
Tal y como he comentado al principio del post, éste un mini resumen de las ideas que plantea Desmond Morris acerca de las diferentes fuentes de felicidad con el objetivo de que si se entiende ese término esquivo podamos llevar una vida más dichosa.
Fuente: "La naturaleza de la felicidad". Conocer la verdadera felicidad nos ayuda a alcanzarla. Autor: Desmond Morris. Editorial Planeta
La felicidad significa cosas muy distintas según las personas: la felicidad imperiosa de cazar a una presa, metamorfoseada y elevada hoy en día a la consecución de empresas creativas. Con la Revolución Agrícola sobrevino un desastre para muchas personas, hombres y mujeres inteligentes orientados a una meta, ya que se vieron y se ven todavía obligados a una vida rutinaria en el campo. La Revolución Industrial no mejoró la situación, el trabajo se hizo aún más anodino, y el objetivo del producto final les era ajeno. Habíamos pasado de luchar contra la esclavitud en Grecia para sustituirlo por la esclavitud asalariada. Una tarea aburrida y repetitiva sustituía a las emociones de la caza primitiva; esta circunstancia hizo que hubiera que buscar la felicidad en aficiones y vacaciones, en los aledaños de la vida, no en el centro.
La situación va corrigiéndose actualmente pero muy despacio. La tecnología informática nos va a proporcionar la oportunidad de sustituir al esclavo asalariado por el esclavo mecánico y es un deber de la sociedad actual asegurarse de que con ello se reduce al mínimo el trabajo aburrido repetitivo sin merma de los ingresos. La posibilidad de una nueva edad de oro está al alcance de la mano sólo si el mundo de la política logra atraer a los espíritus más imaginativos de entre nosotros. Ya va siendo hora de que los políticos se tomen la molestia de averiguar a qué clase de especie pertenece el ser humano y qué es lo que le hace feliz.
Lo que está claro es que existen diferentes fuentes primarias de felicidad:
- Felicidad de finalidad: Deriva de nuestros antecesores cazadores
- Felicidad competitiva: El gozo de ganar, originado en nuestro pasado social al evolucionar hacia tribus
- Felicidad cooperativa: Basada en la necesidad de ayudarnos mutuamente para sobrevivir
- Felicidad Intelectual. Cuya recompensa son los propios actos intelectuales
LAS CLASES DE FELICIDAD
FELICIDAD DE FINALIDAD
El emprendedor
Esta felicidad tiene tres fases: la anticipación, la apetencia y la consumación. Dada la clase de animal que somos- intensamente curiosos, explorativos e inventivos- constantemente imaginamos nuevos proyectos, experiencias y retos, y planificarlos nos hace felices. Al concluir cada tarea nos invade una felicidad por la súbita satisfacción que sentimos. Un breve descanso y vuelta a empezar.
FELICIDAD COMPETITIVA
El triunfador
Está relacionada con la anterior pero existe una diferencia clave, en la competitiva la felicidad siempre tiene que ser a costa de un rival. La terrible definición sería: "La felicidad es una sensación agradable que surge al contemplar la desgracia ajena", una definición menos inquietante sería: "La felicidad es un placer que no se comparte"
El cooperador:
Siempre hemos tenido que compensar la competitividad con la cooperación porque, como animales tribales que somos, pocas veces habríamos logrado el éxito como individuos solitarios. Y nos procura felicidad, no por un sentido moral de comportamiento sino porque biológicamente estamos programados para el apoyo mutuo.
El comportamiento cooperativo puede parecer altruista, pero en realidad es tan egoísta como el comportamiento cooperativo. Si experimentamos una felicidad ayudando a nuestros amigos, ello es debido a que la evolución ha previsto que los miembros de la tribu se ayuden mutuamente como mecanismo de defensa contra el fracaso del grupo.
Todas las organizaciones humanitarias actúan sobre esa base, y la felicidad que les produce llevar comida a los hambrientos en su área de acción (antes era en países remotos, hoy es en el barrio o comunidades cercanas) se basa en su capacidad para verlos como prolongación de su propia comunidad
FELICIDAD GENETICAEl parentesco
El impulso de reproducir la especie es un imperativo biológico tan poderoso que su consecución procura momentos de "felicidad genética". Todas las fases de este proceso - enamorarse, emparejarse, el nacimiento y crianza del retoño- son susceptibles de inducir profundas oleadas de felicidad primitiva-
El amor por la pareja o el hijo supera cualquier otro afecto tribal en razón al factor genético. "Enamorarse" es una intensa experiencia emocional en nuestra especie y algo que nos distingue de otros primates y simios. Aunque el amor y el sexo están íntimamente relacionados, es evidente que la dicha amorosa y la dicha sexual son dos sensaciones distintas.
La felicidad sensual sin sexo puede llegar a ser muy profunda, y existen también numerosos ejemplos de etéreo placer del amor platónico, pero cuando ambos se combinan, el resultado en cuanto a intensidad emocional resulta explosivo, y procura lo que probablemente sean los momentos de felicidad más intensa que conoce el ser humano
FELICIDAD CEREBRALEl intelectual
Como el cerebro humano ha adquirido un gran tamaño a lo largo de la evolución, en su fase actual es capaz de obtener una sensación de felicidad simplemente jugando consigo mismo: la esencia de estos juegos que pueden ir desde los más triviales- jugar a las cartas o jugar al ordenador- a los más profundos, de creatividad artística e investigación científica, es el ejercicio cerebral lo que conlleva procesos de pensamiento complejos que son motivo y fin en sí mismo.
Las anteriormente citadas son las fuentes primarias de felicidad, siguiendo al autor tendríamos otras fuentes que solamente las citaré
FELICIDAD DEL RITMO: El bailarín, relacionada con las actividades rítmicas intensas. Música, canto, danza, la gimnasia, el atletismo. Cualquier actividad humana que tenga un compás, tiene la virtud de arrastrarnos a una vertiginosa y extraña sensación de euforia.
FELICIDAD DEL DOLOR: El masoquista, extrañamente hay adultos que han modificado el sistema de alarma biológico de autoproteccion orientados a la supervivencia y buscan el dolor como medio para lograr un estado de excitación placentera y que, en los extraños rituales sadomasoquistas, se dejan pegar o torturar físicamente de diferentes maneras. Se trata de una modalidad curiosa de felicidad pero muy importante para los que la persiguen.
FELICIDAD DEL RIESGO: El temerario, asumir riesgos deliberadamente es un medio de felicidad para ciertos individuos para quienes la vida carece, por lo visto, de retos.
FELICIDAD SELECTIVA: El histérico, este es el tipo de felicidad basado en ignorar los horrores de la vida que nos rodea. Los depresivos creen ser los únicos que ven el mundo en su aspecto real y que la gente feliz no ve y no entienden que nadie pueda disfrutar de un momento de felicidad mientras haya miles de personas hambrientas, torturas en las cárceles, experimentos con animales, polución medioambiental o cualquier otro desastre que a ellos tanto le preocupan.
CONCLUSIÓN
El autor, como resumen define de esta forma la felicidad: "el súbito trance de placer que se siente cuando algo mejora". La clave para comprenderla es saber que sólo existe en su forma intensa cuando se produce algo muy bueno en algún aspecto de nuestra vida. Este instante pefecto puede ser una experiencia importante como el nacimiento de un hijo o algo tan trivial como un refresco o un día de placer culinario.
Por estar ligada al cambio, la felicidad intensa no es una sensación duradera, sino efímera; es evidente además que se presenta de muy distintos modos y se obtiene en muy variadas circunstancias.
La clave para aumentar la "FELICIDAD DE FINALIDAD" radica en comprender que la especie humana no está hecha para llevar una vida trivial y rutinaria, carente de grandes retos.
Por lo cual a mi modo de deducir, no lo afirma el autor, emprender estaría dentro de nuestra naturaleza intrínseca que nos viene marcada biológicamente de nuestros ancestros, en nuestro marcador genético.
Para quiénes aspiren a ganar puntos en la escala de felicidad la clave es negarse a aceptar que exista un solo tipo de felicidad y reconsiderar las fuentes alternativas de satisfacción a que pueden recurrir; hay ámbitos vitales en los que nunca hubiéramos pensado que pudiera hallarse un filón de felicidad.
Tal y como he comentado al principio del post, éste un mini resumen de las ideas que plantea Desmond Morris acerca de las diferentes fuentes de felicidad con el objetivo de que si se entiende ese término esquivo podamos llevar una vida más dichosa.
Fuente: "La naturaleza de la felicidad". Conocer la verdadera felicidad nos ayuda a alcanzarla. Autor: Desmond Morris. Editorial Planeta
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